Debes saber que una mala elección puede provocar daños en su audición, especialmente cuando los niños son tan pequeños y el nivel de volumen demasiado alto puede producirles daños en su sistema auditivo.

Los auriculares para niños y niñas se han convertido en un accesorio imprescindible en hogares con niños de corta edad. Son la alternativa a la que recurren todos los padres cuyos hijos ven contenido infantil en sus dispositivos, ya se trate de ordenador, tablet, teléfono o incluso televisión.

Otra buena razón para invertir en los mejores auriculares para niños puede ser su uso en el coche o en desplazamientos. Dejar que tus hijos puedan ver una película durante un trayecto de larga distancia, puede suponer un entretenimiento y relax para poder centrarte en la conducción.

El problema es que los auriculares que habitualmente dejamos en sus manos no son los más apropiados. Tampoco lo son aquellos que suministra una aerolínea durante un viaje, dado que no están diseñados para cabezas pequeñas o para llevarlos puestos durante mucho tiempo.

Es necesario considerar el ajuste de la diadema, la comodidad al llevarlos puestos, así como su diseño. Utilizar unos buenos auriculares tampoco implica que puedan ser utilizarlos de manera constante. Debes limitar el tiempo que los utilizan, sea cual sea su nivel de volumen.

El nivel máximo de ruido recomendado por las principales organizaciones de la salud auditiva es de 85 decibelios, con lo que nuestra recomendación para los niños sería que en ningún caso deberías superarse esa cifra.

Según las fichas técnicas de los productos, los auriculares para adultos suelen tener un nivel de audición máximo de 115 dB (equivalente al paso de un tren). Los expertos advierten que es posible llegar a experimentar una pérdida auditiva severa si diariamente escuchas música durante 15 minutos a ese nivel de ruido.

Los mejores auriculares para niños y niñas de 2022

				El más completo en funciones					   					Calidad de materiales					   					Volumen limitado					 

				Precio elevado					 

Sin duda, adquirir los Puro Sound es dar un paso adelante con respecto a la mayoría de los auriculares aquí tratados, los cuales se encuentran entre los 20 y los 40 €. A su favor hay que indicar que podrán utilizarlos también los adultos por su acabado premium.

Pero el incremento significativo de precio no solo repercute en un diseño y acabados más elegantes, sino que también repercute en la calidad de audio que es notablemente superior a la del resto, y a pesar de utilizar tecnología inalámbrica Bluetooth.

El aspecto inalámbrico de los Puro BT2200 también es interesante de cara a evitar que los auriculares puedan dañarse fruto del uso por parte de los niños, o si te preocupa que el cable pueda enrollarse alrededor del cuello de un menor.

Su volumen se limita a los 85 dB y consideramos que es suficiente para ver películas, series o cualquier otro contenido de música, como estima la organización OMS. Se comercializan dos modelos con acabados en colores blanco y plata, o bien, oro y en tono transparente.

La tecnología Bluetooth implica que los auriculares deben ser cargados, con una duración de batería media de hasta 18 horas, suficientes para afrontar cualquier viaje. Además, se incluye un cable para poderlos utilizar también de esta forma. Los controles de volumen quedan ubicados en el auricular izquierdo.

De esta forma, los BT2200 de Puro Sound Labs cuestan más que cualquier otra oferta de auriculares para niños, pero la mejor calidad de audio, la calidad de construcción y la opción inalámbrica son unos extras que bien justifican su mayor precio.

				Ligeros y manejables					   					Control máximo de sonido					 

				Cable demasiado corto					   

La diadema es ajustable a la cabeza, de manera que puede adaptarse a cualquier tamaño. También es de valorar el hecho de que los materiales no sean de plástico, sino que se encuentran recubiertos de goma espuma para que el niño no se haga daño al manipularlos. En ocasiones, se quedan dormidos con ellos puestos y puede que les presionen la cabeza.

Otro dato a su favor es el hecho de que el cable de conexión hacia la fuente de audio de los EasySMX Kids sale por un único auricular, algo que evitará que constantemente se enreden los cables o resulten más incómodos de usar por parte del niño.

				Limitador de volumen					   					Marcación de R y L					   					Personalización					 

				Cancelación de limitador de audio por botón					 

Esto modelo Little Rockerz cuenta con un cable de 1,2 metros de longitud, además del limitador de nivel máximo de sonido fijado en los 85 dB. Los acabados de sus almohadillas son de tela y fieltro suave, lo que protege en gran medida las orejas del niño y evita que le queden marcadas.

La calidad de audio es más que aceptable para los niños que los utilicen para ver películas o jugar a algún juego en la tablet.

La marca iFrogz cuenta con un amplio catálogo de productos de sonido en esta gama de precios de entrada, lo que hace posible que ofrezca calidad de audio a un precio muy competitivo.

				Almohadillas cómodas					   					Recomendación por edades					 

				Cables en ambos auriculares					 

Se encuentran a la venta en dos colores vivos como son en azul y amarillo (los evaluados) y en rosa y púrpura, ambos modelos muy coloridos. Su limitador de volumen vuelve a fijarse en los 85 dB, sonando un poco más altos que los Griffin MyPhones.

Su cable de 80 cm de largo es adecuado para utilizarse junto a un teléfono móvil, tableta o portátil, pero no intentes conectarlos a la televisión, para lo que hará falta un cable extensor.

A diferencia de otros auriculares, los JVC Kids se adaptan muy bien a la cabeza siempre y cuando el niño se los ponga de manera adecuada, con la ‘R’ en la derecha y la ‘L’ en la izquierda. Están marcados para su distinción, pero puede que un niño pequeño no se fije en ello.

Junto a los auriculares, JVC incluye toda una serie de pegatinas con letras y dibujos con el fin de que el propietario pueda personalizarlos a su gusto.

La compañía dispone de otro modelo HA-KD10 que es 50 € más caro y ofrece la posibilidad de cancelar el limitador de audio mediante el botón del cable central. La idea es que un hermano de mayor edad también pueda utilizarlos sin esta limitación.

				Nivel máximo de 85 dB					   					Fácilmente reemplazables para su lavado					 

				Uso en temporada invernal					   					Fijación a los oídos					 

Además, otro aliciente es que pueden mantener calientes las orejas de los más pequeños si son utilizados en exteriores en pleno invierno. El sistema además, está pensado para evitar que se rompan ante caídas como les puede suceder a unos auriculares normales.

La calidad del sonido nos ha parecido buena, incluso en los casos en los que el niño o niña tenga el pelo largo. Aunque su hoja de especificaciones marca un nivel máximo de 85 dB, en realidad se encuentra en el extremo más silencioso del espectro de audio, lo que agradará a los padres.

Los altavoces pueden quitarse fácilmente para que la cinta de pelo sea lavada en la lavadora. Existe una amplia gama de diseños de la marca en forma de mascotas como monstruo, avión, jirafa, pingüino, cerdito, pollo y gato.

				Económicos					   					Variedad de colores para elegir					 

				Baja calidad de audio					   					Diadema de plástico					 

De tamaño, resultan ser más pequeños que la oferta para adultos, por lo que se adaptan bastante bien a la cabeza del niño, expandiéndose para poder utilizarse en cabezas de diámetro superior.

Las cómodas almohadillas acolchadas impedirán que existan fugas de ruido, algo que agradecerán las personas que se encuentren a su alrededor. En el lado negativo hay que anunciar que carecen de limitador de volumen.

Si puedes llegar a confiar en que tus hijos harán un uso responsable de los mismos, manteniendo un nivel de volumen bajo, podrían convertirse en una gran elección. Ahora bien, debes ser consciente de que el nivel máximo de nuestras pruebas alcanzó los 113 dB, por lo que corres un riesgo real de audición.

Los Groov-e Kidz encuentran disponibles en diferentes acabados, como en rojo y negro, rosa y blanco, violeta y blanco, así como azul y negro a un sorprendente precio.

Limitar el volumen de los auriculares que se les da a los niños es una decisión inteligente si quieres proteger su audición, pero algunos expertos aconsejan que los niños prescindan de su uso en la medida de lo posible.

La Organización Mundial de la Salud sigue (OMS) y la UE establecen que 85 dB es el límite de seguridad efectivo, mientras que la Agencia de Protección Ambiental de los Estados Unidos recomiendan los 70 dB como nivel medio diario de exposición al ruido. La cifra de 85 dB procede de estudios y pruebas realizadas con adultos y no con niños.

Dado que los 70 dB es un valor bajo y no eliminará el ruido ambiental en la mayoría de las ocasiones, los 85 dB se convierten en la norma a pesar de ser potencialmente perjudiciales para la audición de los jóvenes.

Existen otras razones para pensar que los 85 dB no son apropiados para los niños. Los oídos de los pequeños, debido al crecimiento y desarrollo, cuentan con canales auditivos externos más pequeños, además de que el tímpano queda más cerca de la fuente de sonido.

Otra consideración asociada al uso de los auriculares por parte de los niños es que los padres no pueden supervisar el control de volumen, algo que sí es controlable a través de los altavoces del televisor.

Con esta cantidad de advertencias y recomendaciones, hemos reunido a los mejores audífonos para niños. Aunque no todos cumplen los requisitos indicados, los hemos probado entre un grupo de niños con padres exigentes.

En líneas generales, buscamos que tengan un limitador de volumen efectivo para proteger la sensibilidad. También que ofrezcan un ajuste cómodo para sus cabezas más pequeñas. Por último, no dejamos de lado un diseño divertido y que les resulte llamativo.

En ningún caso es recomendable utilizar auriculares de tipo in ear o intraaurales, también conocidos como de botón por introducirse en la oreja. Pueden causar mayor daño.

Por último, los auriculares con cable también pueden suponer un riesgo asociado a la estrangulación en aquellos niños menores de tres años que los usen sin supervisión. Los modelos inalámbricos, aunque con mayor coste, pueden solventar este inconveniente.

Alfonso lleva más de 20 años escribiendo y analizando productos de tecnología de consumo. Formó parte del staff de la revista PCWorld y, años después, se enorgullece de seguir siendo crítico en las reviews de productos que realiza.